Sorpresudas sorpresas

Pensaba escribir esto cuando me fuera de aquí... pero qué diablos! Por qué esperar si la inspiración la tengo ahora?

Me veo en la situación de tener que marcharme de la ciudad que nos ha visto crecer, y ahora mismo, no quiero.
Me veo en la situación de tener que dejaros aquí, y no quiero.
Quizá, el arte, el teatro... o lo bien que lo pasamos en nuestras "formales" reuniones me haya hecho dejar de veros como "los del teatro" a veros como "mi familia Simbiótica" (y lo del papel de madre, se lo dejo a "Uyulala", que a mi bastantes quebraderos de cabeza me dais!)


Doy gracias al señor Presidente de la asociacion, el mas loco de todos nosotros, por unirnos a todos por un ideal común.
Y os doy gracias a todos, por ser como sois, tan singulares y a la vez tan parecidos, pues aunque no lo creais, todos estamos muy locos para habernos metido en esto.




Pero especial, doy gracias a alguien que me ha sorprendido singularmente, por ser tan parecido a mí, excepto en que él prefiere el té y yo los batidos de chocolate ;)
Gracias, amigo



Os quiero, familia

Me gustas cuando dices tonterías,
cuando metes la pata, cuando mientes,
cuando te vas de compras con tu madre
y llego tarde al cine por tu culpa.
Me gustas más cuando es mi cumpleaños
y me cubres de besos y de tartas,
o cuando eres feliz y se te nota,
o cuando eres genial con una frase
que lo resume todo, o cuando ríes
(tu risa es una ducha en el infierno),
o cuando me perdonas un olvido.
Pero aún me gustas más, tanto que casi
no puedo resistir lo que me gustas,
cuando, llena de vida, te despiertas
y lo primero que haces es decirme:
«Tengo un hambre feroz esta mañana.
Voy a empezar contigo el desayuno».

Luis Alberto de Cuencua